Odotipo empresarial, encontrando el aroma para cada negocio

Sin duda alguna el marketing olfativo ha dado mucho de qué hablar, pues es una de las formas más efectivas de atraer y fidelizar clientes, sin embargo algunos conceptos aún son desconocidos, como el de odotipo empresarial, que es una especie de logotipo olfativo, único y especial, pues es un aroma propio que ayuda al consumidor a identificar a la marca, identificarse con ella, recordarla y asociarla con experiencias positivas, lo que al final se traduce en mayores ventas o visitas al establecimiento comercial.

Sin importar el tamaño de la empresa o negocio, los aromas son grandes aliados para generar diferentes sensaciones; algunas marcas se han caracterizado por utilizar aromas para incrementar sus ventas, aunque no sean parte del mundo de la perfumería, como las famosas cadenas de donas o de café en las que se han utilizado difusores para aromas, impregnando el ambiente con fragancias deliciosas, que despiertan el apetito y el deseo de consumir. Uno de los mejores ejemplos de este tipo de difusión aromática nos lo da el lugar “más feliz del mundo”, el famoso parque de diversiones que representa un ratón aún más famoso, donde se emplea el aroma a palomitas de maíz para despertar el apetito de los visitantes y atraerlos hacia el área de comida.

El marketing olfativo es el medio ideal para transmitir mensajes relacionados con la marca y generar sensaciones, emociones o recuerdos positivos pues la memoria olfativa puede recordar el 35% de todo lo que huele, mientras que la visual solo recuerda el 5%, por lo que resulta una estrategia de gran utilidad.

Sin embargo, no basta con aromatizar un establecimiento o un producto en particular; la elección del odotipo debe ser tomada con la ayuda de un experto, pues un aroma inapropiado puede tener efectos contraproducentes. Los expertos en marketing olfativo realizan toda serie de estudios de mercado, analizando las preferencias y los comportamientos probando diferentes aromas, tomando en cuenta la personalidad e imagen de cada empresa. Por ejemplo, los centros de belleza se benefician con aromas florales, mientras que un bufete jurídico se hará más elegante con un aroma amaderado.

En caso de no contar con la ayuda de diseñadores olfativos, podemos utilizar fragancias sutiles, agradables y “neutras” como el aroma a manzana canela, rosas o vainilla, dependiendo del giro del negocio; evitemos el uso de inciensos o velas cuyo humo puede ser desagradable e incluso propiciar un accidente. Podemos encontrar difusores de aroma profesionales, que abarcan grandes áreas con pequeñas cantidades de aroma para que rinda más y cumpla con su objetivo.

Utilizar un odotipo empresarial nos ayudará a reflejar los valores de la marca o institución, así como a darle la oportunidad al cliente de sentirse identificado, lo cual implica una ventaja por encima de la competencia.